Los niños del primer grado se encuentran en un
proceso de transición entre el nivel inicial y el
primer grado. Esto les significa llegar a una nueva
escuela, a otra aula, un nuevo docente y nuevos
compañeros. Para que este tránsito sea positivo
es necesario realizar actividades en la escuela
y en aula que permitan que el niño se sienta
acogido por todos.
La organización del espacio físico los sectores,
carteles, las mesas y la ambientación en general–
debe conectarse con los niños y hacerles sentir
que se encuentran en un lugar familiar y seguro.
Igualmente, el trato hacia ellos debe ser tan cercano
como lo era en el Nivel Inicial. Los niños esperan
que los llamen por su nombre, que jueguen con
ellos, que se acerquen a preguntarles cómo están y
si se sienten bien.